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¿Qué tipo de entrenador se considera un modelo a seguir para los jugadores?
El tipo de entrenador que se considera un modelo a seguir para los jugadores es aquel que practica lo que predica, manteniendo una coherencia entre sus palabras y acciones. Esto implica llevar un estilo de vida saludable, mantenerse en forma y mostrar pasión por el deporte.
Los jugadores, especialmente los más jóvenes, ven en su entrenador un ejemplo a seguir y tienden a imitar sus actitudes y hábitos. Por lo tanto, un entrenador que se cuida y se mantiene en un buen tono físico, se esfuerza y demuestra un compromiso genuino con el deporte, inspira a sus jugadores a hacer lo mismo.
No se trata solo de la apariencia física, sino de transmitir valores como la disciplina, el trabajo duro, la perseverancia y la importancia de un estilo de vida saludable. Un entrenador que encarna estos valores con su propio ejemplo tiene mayor impacto en la formación integral de sus niños, adolescentes y jóvenes futbolistas.
Conviene insistir en ello, que la imagen de un entrenador en forma, deportista y activo genera respeto y confianza en sus jugadores. Esta confianza facilita la comunicación, el rigor y la receptividad a las indicaciones del entrenador.
Si bien no es necesario haber sido un futbolista destacado ni tan siquiera profesional para ser un buen entrenador. Eso lo estamos viendo en estos últimos tiempos. Y afortunadamente para el fútbol cada vez vemos más técnicos jóvenes en los banquillos dirigiendo equipos profesionales, y que son entrenadores desde el principio, es decir que no jugaron al fútbol.
Lo que, sin embargo, si es es muy importante, es ser un deportista en el sentido amplio de la palabra, manteniendo un estilo de vida activo y saludable.
Los jugadores en etapas aunque sean en etapas de iniciación, ya perciben la incoherencia entre el discurso y la práctica, y un entrenador que no cuida su propia salud y forma física pierde credibilidad y dificulta la transmisión de valores deportivos. No basta con haber sido un famoso jugador, ya que su etapa como futbolista profesional ya ha pasado, y hay que vivir el presente. El pasado, ya no existe.
En resumen, el entrenador que se convierte en un modelo a seguir para sus jugadores es aquel que:
Predica con el ejemplo, manteniendo un estilo de vida saludable y activo.
Demuestra pasión por el deporte, inspirando a sus jugadores a esforzarse y mejorar.
Transmite valores deportivos a través de su propia conducta y actitud.